Reportatge a la Revista Horse Evolution, gener 2018
Us transcribim el reportatge publicat a horse evolution:
“ACTIVIDADES ASISTIDAS CON CABALLOS PIE A TIERRA
Montamos a caballo para satisfacer una necesidad humana, no una necesidad equina. Si fuéramos seres respetuosos con nuestro entorno y con el resto de terrícolas, cuando decidimos hacer cualquier tipo de actividad con animales deberíamos plantearnos, si ésta resultará beneficiosa para esta especie y que incidencia tendrá en el medio, en confrontación al interés humano perseguido.
Por lo que respecta a los caballos, más allá de los santuarios y de las reservas equinas, en las que se intenta darles unas condiciones de vida similares a sus ecosistemas naturales, en el resto de intervenciones que hacemos con los caballos priman los intereses humanos.
Desde nuestro ego anteponemos: Mi derecho a ganar dinero, mi derecho a divertirme, mi derecho a trabajar con menos esfuerzo, mi derecho a que me transporten, mi derecho a crear medicinas, mi derecho a crear razas, mi derecho a comer carne, mi derecho a usar su piel en los complementos, mi derecho a competir, mi derecho a las terapias alternativas o complementarias, mi derecho a…
¿Qué hay de su derecho a la vida, a la libertad, a desarrollarse en su medio natural, al gregarismo, a su cultura? Llenaremos páginas de libros y revistas especializadas explicando, con más o menos acierto, entre otras, la forma de hacer todas las actividades que hacemos a costa de los caballos para obtener un mejor rendimiento y/o para ser más respetuosos con ellos. Sea como sea, en el peor de los casos todo irá encaminado a conseguir más dinero cosificando al caballo y, en el mejor de los casos, se buscará paliar la esclavitud que les infligimos desde hace milenios.
Por mi parte confieso que en el pasado cada vez que encerraba un caballo en un box tenía la sensación de que decretaba prisión contra un inocente. Herraba a los caballos creyendo que protegía sus pies cuando, en realidad, sin saberlo, estaba perjudicando, entre otros, su sistema cardiovascular. La fusta y las espuelas me daban la confianza de que si en algún momento mi montura se resistía a avanzar, dichos elementos serían lo suficientemente persuasivos como para desalentar tal reacción sin tener en cuenta que pensaba y sentía el caballo.
Afortunadamente mi desazón interna me llevó a buscar otras formas de tratar a los caballos y abandonar el bárbaro sistema tradicional que imperaba cuando yo era más joven. De esta evolución vino, en su fase inicial, deshacerme de la fusta y las espuelas, montar con riendas libres (sin embocadura), descalzar a los caballos de herraduras para usar botas y aprender etología. Estos pequeños pasos propiciaron el convivir a diario con equinos disfrutando y aprendiendo de su compañía sin más y, de esta relación, en 2012 nació EQUÀNIMA.
EQUÀNIMA es una empresa animalista ubicada en La Seu d’Urgell que, con la voluntad de ayudar a los caballos y a las personas, presta, entre otros, servicios de coaching, equinoterapia, ecoturismo y formaciones sobre etología.
En EQUÀNIMA los caballos viven en manada y en libertad. No existen box y todas las actividades que se practican se realizan pie a tierra, los caballos no se montan.
Y, ¿en qué consite el coaching con caballos? En facilitar que las personas, a nivel individual o colectivo, tomemos consciencia y seamos congruentes. Equilibramos nuestro pensar, sentir y obrar para tener una vida más feliz y más plena, lo que nos permite estar asertivamente orientados a cumplir nuestros propósitos.
En cuanto a la equinoterapia pie a tierra, consiste en una actividad complementaria a los tratamientos que siguen nuestros usuarios encaminada a mejorar sus habilidades emocionales, comunicativas, sociales, psicomotrices, sensitivas, cognitivas y de aprendizaje. Pensamos que hay que realizar lo posible para alcanzar lo imposible y lo corroboramos cuando, paso a paso, constatamos la mejora de nuestros usuarios.
Desde el ecoturismo y desde nuestras formaciones difundimos las principales características y necesidades de los equinos propiciando que los clientes i alumnos interactúen con ellos y experimenten qué sienten, cómo se comunican, qué relaciones establecen y cómo se comportan los caballos. Fomentamos la mejora de la relación entre especies, orientada al bienestar de los equinos y a mejorar sus condiciones de vida.
Trabajamos desde la convicción de que resulta un asunto urgente que los humanos usemos nuestra inteligencia para crear un mundo más justo y respetuoso con todas las especies y con nuestro entorno.
Marta Rey Cervós
Directora Fundadora de EQUÀNIMA
Abogada especialista en derecho animal
Coach con caballos
Equinoterapeuta pie a tierra
Formadora”